sábado, 19 de septiembre de 2009

Mi Muy Breve Encuentro con Larry Niven

Este mes Larry Niven es portada en Locus a causa de una entrevista que se puede encontrar en sus páginas interiores, pero que yo no podré leer pues no estoy suscrito (aunque llevo meses meditando sobre cambiar esta situación). Ver su rostro en la revista por supuesto me hizo recordar mi breve encuentro con él en la Convención Mundial de 2007. En realidad, fueron varios breves encuentros, topándomelo en pasillos o asistiendo a alguna conferencia, pero entre ellos destaco dos momentos especiales.
El primero, y el más significativo, fue cuando finalmente firmó mi copia de "Ringworld", comprado en una libreria de Shinjuku (barrio comercial de Tokio) especialmente para ese proposito. Por supuesto el volumen ocupa ahora un lugar de honor en mi biblioteca, no solo por la firma, sino porque, claro, "Mundo Anillo" es sin duda uno de los principales clásicos del género.
La segunda fue cuando quise obtener una segunda firma y una foto para mi cuaderno de recuerdos de la Convención. Ese día en particular había estado de cacería buscando proceres de la ciencia ficción por cada rincón del hotel, y me vine a encontrar con el señor Niven, siempre con su clásico bolso negro atravezado, en un salón de café montado en la sección de exhibiciones. Solo que no era un salón de café cualquiera, sino que un Maiden Coffee, uno más de esos exóticos símbolos de la cultura pop japonesa que cualquier fanático occidental del animé debiera reconocer: jovenes señoritas vestidas de empleadas domésticas, mucho negro, mucho encaje, y faldas muy cortas. Dice la mitología que las versiones más ortodoxas de estos cafes incluyen una atención muy cariñosa e incluso íntima, aunque ese no era el caso en este espacio que era de caracter más académico e internacional.
Como fuese, allí estabamos el señor Niven y yo. No se si mi presa de turno (recuerden que andaba de cacería) estaba solo tomandose un café, pero lo que es yo estaba allí solo y unicamente para obtener una fotografia y un autografo. Mi atención exclusivamente dedicada a aquella leyenda de la ciencia ficción, jamás a los elementos distractores que deambulaban por el lugar.
Y bien. Dejando de lado las vueltas de la vida y mi torpe intento de humor irónico les cuento que logre mis objetivos y aquí, junto a la portada de Locus, les ofrezco esa fotografia conseguida con tanto sudor y esfuerzo.


Quizas debiera agregar aquí alguna referencia al excelente trabajo de Niven, el mencionado "Mundo Anillo" y sus colaboraciones con Pournelle, sus múltiples galardones, y demás. Pero no. Niven se merece un articulo especialmente dedicado a ello, uno que requerirá de mucho estudio, mucha relectura. Solo señalar aquí que es un privilegio que escritores como Niven, Silverberg o Haldeman les haya tocado la imposible tarea de reemplazar a los míticos Asimov, Heinlein, Anderson, etc. Pero lo han hecho con dedicación y compromiso, sin parar de escribir, sin dejar de asistir a las convenciones y compartir con sus lectores. Para mi por lo menos, como ya lo he dicho anteriormente, haber podido compartir con ellos ha sido ver como algunos de mis sueños de infancia se hicieron realidad.

No hay comentarios: